viernes, 6 de abril de 2007

Volando a bajo costo

Sin lugar a dudas, uno de los trabajos más interesantes que tuve que realizar durante mis estudios de postgrado fue el de análisis financiero internacional. En él, había que comparar estados financieros de empresas del mismo sector industrial pero de diferentes países a fin de aprender las diferencias en su presentación. Escogí el sector aeronáutico o mejor dicho, de las aerolíneas. Bajé de Internet los estados financieros de Alitalia, Iberia, Lufthansa, British Airways, United Airlines y Lan (todas sociedades anónimas abiertas). A parte de aprender cómo se visualizan los estados financieros en los diferentes países, me pude dar cuenta que existen dos factores que son claves para el éxito de cualquier compañía aérea dado el impacto que tienen sobre la utilidad final. El primero es el precio del combustible (que representa alrededor de un 25% de los costos) y el segundo es la eficiencia económica en el uso de sus activos, es decir, que los vuelos estén completamente vendidos. Prueba de aquello es que un amigo que trabaja en una importante línea aérea nacional me comentaba que en la última fila del avión estaba la utilidad de la compañía. Las anteriores eran costos.
Estas dos razones se traducen en que las aerolíneas en general pertenecen a un sector industrial muy competitivo y sensible, y que el paso de la utilidad a la pérdida puede estar representado por un alza en los combustibles, o cualquier efecto sobre su demanda como un accidente aéreo o un acto de terrorismo.Sin embargo, y desde hace más años de los que uno cree, han aparecido en el mundo unas aerolíneas llamadas de low cost o de bajo costo. En Chile, la primera en aparecer a mediados de 2005 fue Air Madrid. En Brasil opera con éxito Gol, en Estados Unidos Southwest y Jet Blue, en México Click y en Europa decenas de aerolíneas tales como la inglesa Easy Jet o la irlandesa Ryanair.Estas aerolíneas ofrecen pasajes aéreos a muy bajo precio. Aquí quiero dar algunos ejemplos que me parecen increíble. Existe una aerolínea en Europa que su publicidad indica que puedes realizar cualquier trayecto dentro del continente por sólo 20 euros. Otra, te garantiza que la tarifa que pagues por el trayecto siempre será más económica que la tarifa del taxi que debas pagar desde el aeropuerto de destino hasta la plaza de la ciudad. Por último, y lejos la más impactante en términos comunicacionales es una que te cobra 1 euro como tarifa aérea dentro del propio país, con la condición de que sea un ticket vendido dentro de los 15 minutos anteriores del embarque y si existen asientos disponibles.
La pregunta que surge es ¿cómo estas aerolíneas pueden lograr participaciones de mercado del orden del 30% en países desarrollados y obtener utilidades en medio de la crisis que representó para el sector los hechos ocurridos en septiembre de 2001 y el alza sostenida en el precio del petróleo?Lo primero que uno podría pensar es la reducción en los costos de mantenimiento y seguridad. La verdad es que es tan fiable viajar en estas aerolíneas como en cualquier otra, ya que tanto el mantenimiento aeronáutico como los controles de seguridad son estandarizados. La reducción de costos acontece pero en otros factores.
El primero de ellos es el servicio. Viajar en una aerolínea de bajo costo para muchos es pasar hambre. Cierto es que cuando uno tiene la experiencia de viajar en ellas se da cuenta cómo los pasajeros algo más habituados sacan de su equipaje de mano galletitas y bocadillos de manera escondida a fin de evitar la envidia del resto. En este sentido la experiencia de viajar en avión recuerda aquellos paseos de colegio al Zoológico de Santiago o al desaparecido Mundomágico. Además, el peso del equipaje de mano está restringido a 6 kilos, y para los vuelos trasatlánticos puedes llevar sólo 20 kilos de equipaje. Al interior de Europa o en Estados Unidos hay aerolíneas donde sólo se puede llevar equipaje de mano con un máximo de 5 kilos sin poder llevar más equipaje, abaratando los costos de utilización del aeropuerto y de combustible.
Otro factor de reducción de los costos es la estandarización de la flota, que generalmente es muy nueva. De esta forma se aprovechan las economías de escala de un mantenimiento altamente estandarizado. Además, algunas de estas aerolíneas sólo venden sus pasajes de manera directa (sin intermediarios) y sólo a través de Internet, generando ticket electrónicos de costo casi nulo.Otra reducción de costos importantes, es la utilización de aeropuertos secundarios o en ciudades cercanas a una principal (entre 50 y 200 km.), donde el costo de utilización de las instalaciones es mucho más bajo. Por último, y quizás tan importante como la suma de todos los anteriores, es la subvención que reciben de organismos públicos o privados como una estrategia de interrelación estratégica entre localidades con poca afluencia de turistas, y toda la cadena de crecimiento económico que genera el turismo en hoteles, hostales, restaurantes, tiendas varias, y sus proveedores y trabajadores, así como el mayor ingreso tributario por dichas ventas. Adicionalmente, muchas aerolíneas de bajo costo pertenecen a grandes grupos económicos vinculados con agencias de viajes y mayoristas, cadenas de hoteles, etc. donde las grandes utilidades aparecen en otros estados financieros.Sin embargo, las interrelaciones estratégicas que se esperaban en el sector turismo no han sido del todo exitosas, dado que las aerolíneas de bajo costo trasladan en Estados Unidos y en Europa “turistas de bajo costo”. De aquéllos que no se hospedan en hoteles tres estrellas, ni cenan en restaurantes. De hecho ha surgido una gran polémica en Europa por el turismo de una sola noche. Éste consiste en tomar un vuelo por ejemplo en Berlín y viajar durante algunas horas hasta Palmas de Mallorca. Desde el aeropuerto llevan a todos los pasajeros del avión a una discoteque donde disfrutan de la música, del baile, del trago, etc., para posteriormente tomar el avión de regreso a las ocho de la mañana y llegar a Berlín de regreso con un dolor de cabeza increíble. El impacto económico que genera este turista en una localidad es casi nulo, o quizás negativo por la utilización de infraestructura aeroportuaria.Obviamente, este nuevo negocio ha impactado negativamente y sin lugar a dudas a las aerolíneas tradicionales, que están basando su estrategia en otro atributo diferente al precio como es el de la calidad de servicio.
Pero, ¿pueden todas las aerolíneas basar su estrategia en la calidad de servicio como tan bien lo hace Lan?. Y la respuesta es claramente negativa. Por ejemplo, existe dentro de una importante aerolínea española la política de que el personal de cabina pueda escoger los vuelos donde trabajar dependiendo de su antigüedad. Por tal razón, todas las azafatas de más de sesenta prefieren los vuelos trasatlánticos (por ejemplo a Chile) por el mayor pago que reciben y por los días de descanso posteriores al trabajo. De esta manera, los vuelos hacia América están atendidos por señoras de mucha experiencia pero que no necesariamente entregan un servicio de calidad. De hecho caminan por los pasillos del avión con un canastillo en una mano y una pinza en la otra repitiendo: “Pan, pan, alguien quiere pan”, para posteriormente repetir la maniobra diciendo: “Más pan, más pan, alguien quiere más pan” humillando a quien ose pedir uno. Pero el gran impacto positivo de este nuevo negocio se ve reflejado en la oportunidad que tiene el mercado de escoger entre una mayor gama de servicios aéreos, de aumentar su frecuencia de utilización de los mismos, o de utilizarlos por primera vez.
En ese sentido el anuncio hace pocos días de la llegada de otra aerolínea de bajo costo a Chile como es Air Asturias, supone una mejor y mayor competencia con los beneficios que eso nos conlleva. Al mismo tiempo, el impacto que eventualmente podría traer la llegada de “turistas de bajo costo” a Chile no debería ser negativo, dado que nuestros servicios turísticos poseen precios bajos al ser convertidos al euro. Sólo queda estar atentos a los cambios que seguirán sucediendo en este sector industrial, y preparar un buen cocaví para nuestro próximo viaje.