miércoles, 28 de mayo de 2008

Importancia del Mar

Nueve de cada diez encuestados considera estar de acuerdo o muy de acuerdo en que “Chile debe proyectarse y potenciarse más aún en el mar”, y sin embargo al preguntar “¿Cómo evaluaría usted la preocupación y el interés, que nosotros como chilenos le damos a nuestro mar?, el promedio de la muestra es sólo de una calificación de 4,6.

Esta situación diagnostica que pese a que sí le damos importancia al mar como importante fuente de recursos y progreso, le asignamos un nivel de preocupación sólo de nivel básico o suficiente. Entonces surge la interrogante si realmente sabemos y comprendemos por qué el mar es importante.

Nuestro mar es inmenso. Sin considerar el mar presencial, nuestra zona económica exclusiva denominada también “mar territorial” comprende una superficie aproximada de 3.000.000 kilómetros cuadrados donde nuestro Estado posee exclusividad en la explotación y administración de todos los recursos.

Por lo que el mar como recurso es una gran despensa de alimentos de consumo nacional y exportable, una gran fuente de recursos minerales y energéticos descubiertos y aún por revelar, un gran medio de transporte por donde se realiza el comercio exterior, una atracción turística y deportiva, entre muchas otras potencialidades, incluso es fuente inspirador de poetas y pintores.

Si bien Chile era conocido en los siglos pasados a nivel mundial por estar al final del mundo, y no sólo al fin del mundo, sino además mirando hacia la nada. Hoy en cambio, podemos apreciar cómo el país mira y enfrenta literalmente un “mar de oportunidades”. Nuestra ubicación geográfica es fuente de una ventaja comparativa indiscutible en lo que a recursos naturales se refiere.

Es en ese sentido que se debiese crear conciencia en que hay que pensar el mar como un recurso nacional importante, al cual se le ha destinado el mes de mayo para crear conciencia de su importancia, tal como 1 sola persona de la muestra afirmó. Educar y formar en torno al mar es tarea ineludible a nivel escolar y universitario.

jueves, 15 de mayo de 2008

Gestión de Crisis

La existencia humana nos demuestra que las crisis son momentos o instancias de aprendizaje. Oportunidades. Todos en nuestra vida hemos pasado por vivencias autodefinidas como “situaciones límites”, que requieren de nuestra máxima atención y preocupación. Dependiendo de nuestra capacidad de reacción frente al problema, será el resultado que obtendremos, y la situación futura obtenida.

A nivel de empresas, las crisis son, sin lugar a dudas, oportunidades de crecimiento también. Una baja en las ventas, un cambio en la propiedad de la organización, algún hecho de fuerza mayor, una falla en la producción, o un problema con uno de nuestros productos con repercusión pública y, en general, cualquier hecho que produzca una necesaria y urgente reacción en términos de toma de decisiones y recursos.

Como las crisis y emergencias obedecen generalmente a situaciones ajenas a la voluntad gerencial, siempre es conveniente la planificación de las alternativas de solución en un escenario de tranquilidad y sosiego, a fin de tomar las resoluciones adecuadas y la asignación de recursos óptima, y así estar preparado cuando la crisis aparezca y lo amerite.

Relevante es verificar ante qué crisis nuestra empresa se puede ver enfrentada con el propósito de planificar las estrategias frente a ellas. Una auditoría de eventualidades que nos serviría como registro de lo que podremos enfrentar, y por tanto el punto de inicio de la planificación y de una adecuada gestión de crisis.

A nivel país, las crisis y las emergencias también acontecen, por lo que el Gobierno es el responsable de identificar las eventuales situaciones y preparar las estrategias de resolución. Obviamente, como país con fuerte restricción de recursos en relación a los desarrollados, las estrategias para enfrentar una crisis poseen una serie de restricciones económicas ajenas a las motivadas voluntades. En tal sentido, la planificación y no la improvisación cobra mayor relevancia.

En el caso de lo sucedido en Chaitén, el Gobierno ha reaccionado adecuadamente dentro de todas sus limitaciones, considerando que las operaciones que se han debido realizar son de la más variada índole y naturaleza, de alta complejidad, y algunas con eventuales pérdidas de popularidad. Cierto es que todo es perfectible, pero la real magnitud del problema y todas sus complejidades conllevan siempre a tener que decidir y optar por lo que las circunstancias del momento están requiriendo.

La lección que nos deja la crisis en Chaitén, es la de ser capaces de anticiparnos como región, provincia, comuna, empresa, comunidad de vecinos, familia, etc. a las crisis, y decidir ahora, con la tranquilidad de la serenidad cotidiana, cómo enfrentar las urgencias y emergencias que requieren y exigirán nuestra atención, sin la premura de la situación sobre nosotros.

Afirmar que en nuestras vidas no habrán crisis es evadir el futuro y sus posibilidades, inmovilizando nuestras precauciones de un futuro que aún no se escribe.

miércoles, 7 de mayo de 2008

Marketing de Personas

Para muchos expertos en Marketing, incorrectamente llamados “marketeros”, todo es Marketing o, quizás, todo puede analizarse bajo la óptica del Marketing. Incluso las personas pueden ser tratadas como un producto.

Bajo esta perspectiva nace el concepto de “Marketing de Personas”, aquel conjunto de actividades encaminadas a construir una percepción favorable de una persona frente a otras.

Las actividades que implica realizar Marketing en uno mismo son muy variadas. Por ejemplo, según muchos autores, la ropa que uno usa es el envase, y por tanto mientras mejor es el envase, mejor entonces será la percepción que las personas tendrán de uno. Una observación importante que se enseña en el Marketing de Personas, es que vestirse bien no implica vestirse formal. Da lo mismo si uno se viste formal o informal, lo importante es vestirse bien en función de lo que uno quiere comunicar.

Otro punto importante que destacan los autores en este tema es el rostro, ya que es la parte del cuerpo más expuesta a la mirada de los demás. Por tanto, el peinado y el maquillaje en las mujeres son fundamentales.

Pero además de los aspectos estéticos, la dicción, el vocabulario y todo aquel medio con que la persona puede comunicar y construir percepciones debe estar asociado a la imagen que uno mismo quiere transmitir de sí, al mensaje. En el fondo, primero uno debe ser capaz de crear su propia autoimagen para generar el marketing personal correspondiente.

Muchos productos se apoyan en esta idea. Por ejemplo, se venden perfumes para “la mujer urbana e independiente” o corbatas “para el hombre seguro de si mismo”. Y así toda una industria con gimnasios, pastillas para bajar de peso, cremas para las “líneas de expresión” y cirugías estéticas. Incluso hay cursos específicos para hablar bien en público, o de protocolo, o todo aquél que permita mejorar en aquellos atributos propios de tu autoconcepto.

Asumir que uno es un producto quizás puede ser en extremo narcisista, pero quizás ciertos elementos básicos nos pueden ayudar a transmitir la belleza de la autenticidad personal. Después de todo, Narciso murió besando su reflejo en el manantial, que al ser tocado por sus labios disipaba su imagen por el movimiento ondulante de las aguas, imposibilitando lograr besar y contemplar al ser que más amaba, tal como lo ilustra el bello cuadro de Caravaggio.

Día de la Madre

La naturaleza nos recuerda el avance del año y sus fechas. La vergüenza del Liquidámbar con su tono rojizo anuncia el término de abril, y las bayas del Cotoneaster el inicio de mayo. Este contexto nos indica la celebración, como cada año, del Día de la Madre.

Quizás, con ciertos aires comerciales, o de culpa, se siente la obligación casi imperiosa de congratular a quien nos trajo al mundo, o bien nos cuidó de tal manera que merece tal apelativo. Son madres, no sólo porque nos contuvieron por nueve meses, sino porque además nos sostuvieron por otro lapso. Durante éste, valores y enseñanzas a través de su propio modelo de actuar, fueron el marco de nuestro oportuno crecimiento y formación.

Hoy, gran parte de la literatura especializada afirma que el medio, y en particular la familia liderada por la madre y/o el padre, es pieza fundamental en el desarrollo emprendedor de sus hijos. En tal sentido, desde pequeños, los hijos observan el patrón maternal.

En Chile, por ejemplo, se puede apreciar fácilmente como frente a cualquier problema económico, son justamente las madres, las que con iniciativa, tesón, constancia y trabajo generan algún ingreso que ayude a paliar aquella difícil circunstancia.

Con su actuar cotidiano encauzan a sus hijos a través de su propio modelo, de sus valores, de sus actividades, conciernas y opiniones, generando en ellos el sello que les permite enfrentar la vida y sus situaciones. Es aquí donde el entorno familiar puede ser proclive a contribuir y generar una actitud emprendedora entre sus nacidos, a fin de desarrollar en ellos la pasión por la innovación y el goce del trabajo bien hecho.

Importante es destacar que en Chile una de cada cuatro familias es monoparental, siendo en un 80% la mujer la jefa de hogar. Estos porcentajes aumentan notoriamente en las clases socioeconómicas más bajas.

Por tales motivos, la madre juega un rol clave. La de enseñarnos que con perseverancia, entereza y esperanza, se es capaz de enfrentar cualquier tipo de situaciones, aun complejas. Porque el emprendimiento y la innovación nacen en las personas que buscan conferir más que recibir, se originan en aquéllos que buscan entregarse a una idea que les apasiona y que les quita el sueño, que están aptos para darse por completo, en fin, que son capaces de amar. El verdadero emprendimiento y la real innovación nacen de las personas que por amor, son capaces de hacer cualquier cosa, y aunque muchas veces es incomprendida por sus hijos, es el amor la energía de la iniciativa materna.

Por esto, las madres son modelos claves en la actitud emprendedora de sus hijos, y bien merecen que, al menos un día del año, les dediquemos algo más que nuestro cotidiano afecto y aprecio.
Pueden haber madres e hijos que, pese a sus actuales diferencias y conflictos, logren apreciar la sabiduría del tiempo y su perdón, entendiendo la historia y circunstancia de cada uno, pero la reconciliación de ambos. Y quizás ésta sea la mejor iniciativa de esta época del año.