sábado, 26 de diciembre de 2009

Posicionamiento Político

Cada candidato a la presidencia, debe plantear una serie de ideas sobre la visión que tiene de país, sus valores, sus objetivos y las estrategias para llegar a ellos. Todas estas directrices son plasmadas en su Programa de Gobierno. Tales ideas son resumidas por los medios de comunicación escrita y muy sintetizadas en otros audiovisuales. Actualmente pueden ser revisados íntegramente en los sitios web de partidos políticos, o desde la página oficial del postulante presidencial.
Sin embargo, son pocos los ciudadanos que revisan tales programas, ya que por diversas razones, otras prioridades por no decir falta de tiempo o desinterés intelectual, seleccionan a su candidato de su preferencia, o a ninguno si votar blanco o nulo es la opción, lisa y llanamente basado en cuestiones de diversa índole: valores, partido al cual pertenece, trayectoria política, experiencia, imagen, lealtad familiar, etc. Todos estos aspectos, junto a los lineamientos centrales de su Programa de Gobierno son plasmados como ejes centrales del mensaje comunicacional para la campaña política.
Ésta debe centrarse en los temas que son de alto interés del ciudadano común: pobreza, desempleo, salud, educación, seguridad, y otros generalmente testeados con anterioridad por investigaciones de mercado. De esta forma, el mensaje comunicacional de un candidato se basa en ciertos aspectos seleccionados, con ideas claras y explicaciones simples, como las que generalmente entregan, para de esta forma lograr una posición en la mente de los electores cercana a la posición del, por así decirlo, “candidato ideal”. Esto se denomina posicionamiento político.
En tal sentido, y con los resultados de la primera vuelta de las elecciones, se podrían obtener conclusiones sobre su posicionamiento en función de ciertos atributos. Resulta interesante revisar el resultado de las diez comunas con mayor desempleo, donde a excepción de Viña del Mar, Angol y Temuco, Piñera obtuvo 4 puntos porcentuales bajo su resultado nacional, Frei se mantuvo en su votación y Enríquez-Ominami aumentó en 4 puntos porcentuales. Lo opuesto acontece con la otra variable vinculada a la economía y que podría estar correlacionada con la anterior, como es la pobreza. Al considerar las 10 comunas más pobres de Chile, Piñera logró 7 puntos porcentuales por sobre los 44% obtenidos, mientras que Frei se mantuvo cerca de su resultado y Enriquez-Ominami obtuvo 7 puntos porcentuales bajo el 22% conseguido finalmente.
Conclusiones se podrían obtener muchas. Pero a cara de la segunda vuelta, está claro que Piñera debería de atraer en función del atributo “generación de empleo” que despertaba Enríquez-Ominami y consolidarse como el “superador de la pobreza”. Frei en cambio, debería centrarse en los atributos que son de interés de los que votaron por Enríquez-Ominami, y que no se resumen satisfactoriamente en un slogan unificador como el nuevo “Dilo con Fuerza”.