jueves, 14 de octubre de 2010

Rescate Rentable

Probablemente en los próximos días las autoridades de gobierno darán a conocer el costo total de la operación San Lorenzo, que rescató a los mineros de la profundidad de una mina colapsada. Dicha cifra será analizada y comparada de diversas formas y métodos, con lo gastado en otras operaciones como las relacionadas al maremoto y terremoto de principios de año. No siendo confrontables, pues todas tenían por objeto salvaguardar la vida humana, no me cabe duda que el costo unitario de la Operación San Lorenzo será ampliamente superior a cualquier otro rescate acontecido en Chile. Esto no sólo por el elevado numerador del cálculo, sino también por el reducido denominador: 33. Pues bien, la cifra gastada se justifica plenamente por el hecho de salvar una vida, por lo que más se justifica cuando se refiere a la de treinta y tres personas. Pero podríamos hacer el ejercicio de no considerar aquello y buscar otro argumento. Y lo hay.

El actual gobierno tiene una capacidad de comunicación admirable, y prueba de ello fue la impecable transmisión de la operación de rescate, con todas sus emociones, desde diversos ángulos y perspectivas, como si se tratase de un programa de televisión global. Las imágenes oficiales subidas al satélite y de libre disposición internacional fomentaron la amplia cobertura mundial. Como televidente uno podía observar la maratónica transmisión “en directo” de diferentes medios importantísimos a nivel internacional, así como en calidad de internauta se podía apreciar el streaming en diversos medios. En muchos países la transmisión del rescate superó en rating a los programas de televisión locales líderes en sintonía, así como diversos medios compararon el rescate con acontecimientos históricos como la llegada del hombre a la Luna. Por poner una cifra de todas las que están en mi escritorio: la transmisión fue vista por un 25% más de audiencia que el mundial de fútbol de este año.

Por lo mismo, ¿cabe duda de que la imagen de Chile en el mundo no cambió? ¿Qué atributos como nación mostramos durante el rescate? ¿Coraje, valentía, esfuerzo, calidad, perseverancia, tecnología, capacidad, valores, etc.? Ignoro cuáles pues habría que realizar una investigación de mercado para detectar los atributos de imagen, pero no me cabe duda que hoy la imagen de Chile es mejor que la de hace una semana. Y eso tiene un valor económico importante, pues Chile vende bienes y servicios al mundo bajo una marca país, la cual hoy vale mucho más, y ese valor adicional supera ampliamente la cifra del rescate, aun desconociéndola, aun ignorando que por el sólo hecho de salvar una vida ya está más que justificada.

Sin embargo, lo más interesante de esto, y lejos lo más admirable del equipo de gobierno, es que esta altísima rentabilidad se asocia siempre a un enorme riesgo: ¿qué hubiese sucedido si el rescate hubiese fallado ante cientos de millones de espectadores? El gobierno tuvo la capacidad de evaluar el riesgo y jugársela por una operación a nivel mundial que agregó valor a la marca Chile.